En el Palacio de Cristal de Itchimbía, en Quito, se celebró -también organizado por Girándula, Ibby Ecuador- el Maratón del Cuento. Una vez al año se reúnen en este sitio bellísimo, con una de las mejores vistas hacia la ciudad quiteña, más de cincuenta mil personas que vienen a escuchar los textos que leen los escritores para el público, y también otras personalidades del quehacer cultural.
En ese espacio, en el stand de la Editorial Libresa, se presentó mi último libro: Cuando el Diablo anda suelto, ilustrado por Marco Chamorro.
Aquí estoy junto a uno de los personajes de Alicia en el país de las maravillas: la reina de corazones.
Ya estaba partiendo cuando me encontré con un niño de uno de los colegios que había visitado la semana anterior. Él junto a otros niños y niñas de su escuela habían decidido personificarse para participar en esta fiesta. Una fiesta hermosa que sirve para tomar de ejemplo. Gracias otra vez a Leonor Bravo y a toda su gente por habernos recibido con tanto afecto y ser tan exelentes anfitrionas.
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